jueves, 27 de julio de 2017

¿Pueden existir? Dragones lanzallamas.

Todos conocemos los dragones, esos reptiles gigantes de 4 patas y dos alas que reburjitan fuego como si se hubieran zampado dos kilos de pimientos habaneros.
Estos son claramente seres mitológicos y de fantasía, pero... ¿podrían existir?, ¿porqué no existen?
En mi opinión la idea de un animal capaz de lanzar llamaradas no es muy descabellada, teniendo en cuenta que existen bichos capaces de generar explosiones de 600 grados (como el escarabajo bombardero) y algunas especies de termitas kamikaze que se inmolan llenando sus alrededores con jugos calientes y corrosivos.

Sin embargo hay un gran fallo en los dragones, la principal razón por la cual no podrían existir (y no existen) es que tienen 6 extremidades.
Para explicarlo bien:
Todos los vertebrados tienen 4 extremidades (obviando cabeza y cola), a excepción de algunos peces, las lampreas, y las serpientes y anfibios reptantes (estos dos últimos los tienen de forma vestigial).
Y sí, a diferencia de los insectos, las alas de los vertebrados cuentan como dos extremidades.

Los dragones se suponen reptiles, y por tanto descienden del mismo grupo. Los reptiles tienen 4 extremidades.
Para que un hipotético réptil desarrollara dos extremidades más, además de que es improbable ya que las dos nuevas extremidades serían en su desarrollo dos vestigios inútiles (¿de que sirve tener dos muñones articulados?), habría tardado muchísimo tiempo a nivel evolutivo. Así pues estos deberían haber sido anteriores a los dinosaurios.
Si estos reptiles antepasados de los dragones, de 6 extremidades, hubieran existido, actualmente veríamos o habríamos descubierto fósiles de muchas especies de reptiles con 6 patas o 4 patas y 2 alas, además de los propios dragones... y bueno, ¿tú has visto alguno?

Es mucho más probable la existencia de un lagarto con una garra o mano al final de su cola o de un vertebrado con exoesqueleto (de hecho existen, las tortugas son técnicamente vertebrados con exoesqueleto), que de un vertebrado con 6 extremidades.

Pero imaginemos dragones lanzallamas de 4 extremidades (que también suelen aparecer en fantasía y mitología), dos patas y dos alas.
La existencia de estos es más probable que la de los anteriores, sin embargo la ruta evolutiva empleada para obtener la capacidad de lanzar llamas estaría llena de obstáculos y rompecabezas, haciendo que esta capacidad también fuera improbable:
Los reptiles antecesores a los dragones podrían haber desarrollado la capacidad de escupir compuestos químicos corrosivos con el fin de cegar a sus depredadores.
Esto, con el tiempo, podría haber llegado a la capacidad de generar explosiones de líquidos calientes (como los del escarabajo bombardero).
Estas explosiones (¿controladas?) darían lugar a llamas en el caso de que el animal en cuestión eructara gases de metano junto el ataque químico. Con el tiempo, su boca se habría adaptado hasta transformarse en una tobera ardiente, y sus entrañas habrían formado un nuevo órgano como saco de metano.
Sin embargo decirlo es más fácil que conseguirlo, el fuego es un arma de doble filo, y posiblemente los primeros dragones se habrían quemado la boca al eructar metano. Y bueno, quemarse la boca cada dos por tres no es algo muy beneficioso a nivel evolutivo... Además de que la química de los venenos y los escupitajos cáusticos es muy aleatoria. 

Una especie de animal pequeño, un bicho, que se reproduce en dos días, tendrá más mutaciones a lo largo del tiempo que un antepasado del dragón que se reproduce cada año y medio. Habrán más posibilidades y experimentación natural en estos, ya que son más numerosos y efímeros, y por ello pueden tener "cosas inútiles" que no supondrían mucha desventajas.

Es por eso por lo que hay muchas especies de animales pequeños venenosos, y casi ninguna de animales grandes y medianos venenosos.




¿Pueden existir? Unicornios.

Unicornio, curiosa frase. Su significado es técnicamente "un cuerno", así pues, cualquier narval, rinoceronte y/o vaca mutante de un solo cuerno es un unicornio.
Pero claro, es obvio que esa palabra, unicornio, solo se utiliza para designar un animal mitológico específico: un caballo con un cuerno en espiral, como los de los narvales.

Obviando la parte mágica (que claramente es imposible biológicamente), en realidad el diseño del unicornio es factible y viable, es decir, no hay razón alguna por la que no pudieran existir los unicornios... espera sí que la hay.
La principal razón por la cual los unicornios no existen no es porque sean improbables, de hecho su diseño es viable y podríamos crearlos en más o menos de un milenio mediante selección artificial, menos tiempo con transgenesis y técnicas de selección dirigida de genes más avanzadas.
La principal razón es que la evolución es azarosa, igual puede dar lugar a shogott que a un bicho roca.
Que un animal pueda existir a nivel evolutivo, no significa que vaya a existir, así de claro.

En fin, ¿y como estos habrían evolucionado?
Echando un vistazo a animales similares, está claro que la ruta evolutiva sería similar a la de las cabras con cuerno, los rinocerones o los narvales.
La primera opción es que el cuerno del unicornio sea realmente un cuerno, en ese caso suponemos un protocornio, un caballo con una protuberancia en la cabeza.
El cuerno se habría desarrollado poco a poco por el paso de las generaciones y los milenios, hasta dar lugar a una especie de caballo de cuerno fino. Este cuerno se habría enrollado con el paso de las mutaciones. Simplemente.

La segunda opción es que el cuerno del unicornio sea un colmillo, como sucede en los narvales. En ese caso el proceso es similar, pero el resultado, a nivel morfológico interno, es diferente.
La función de este cuerno sería simplemente puramente decorativa (para atraer hembras en poca de apareamiento), un cuerno tan fino no sirve para la defensa ni el combate.
También podría tener una función sensorial, como en los narvales, pero esto sería más complicado en el caso de los unicornios al ser seres terrestres (el aire al que están expuestos no es un buen medio sensorial, a diferencia del agua al que están expuestos los narvales).


¿Pueden existir? Sirenas (de mar).

Ya sabéis de lo que hablo, esos humanoides acuáticos cojiformes (con forma de cojo) cuyo cuerpo es mitad humano y mitad pez.
De primeras estos seres no pueden existir de forma natural, al ser quimeras (ya sabéis, animales compuestos de partes de animales ya existentes, como el grifo y el centauro).
Sin embargo no deberíamos adoptar ese concepto literal de "mitad persona" y "mitad pez".

Animal Planet creó un documental de ciencia ficción llamado "Sirenas" hace varios años, donde se narraba sobre un grupo de científicos que van descubriendo pruebas censuradas por el gobierno de que las sirenas existen, al mismo tiempo que se explica como sería el trayecto evolutivo de estas.
Claramente el documental levantó mucha polémica, pues muchos idiotas personas de poco escepticismo y fácil confusión acabaron llamando a las agencias del gobierno exigiendo que destaparan "la verdad sobre las sirenas", aun siendo que el documental decía al principio "los siguientes echos son ficticios y bla bla bla".

Bueno, olvidemos el detalle anterior.
Lo importante es que en ese documental se mostraba a las sirenas como "hominidos acuáticos con una aleta final", algo así como las morsas y los delfines, pero con brazos y manos útiles, y capaces de fabricar herramientas, cazar de forma planificada y usar delfines.
Según el documental, se presentaba una hipótesis (actualmente descartada) que es la "hipótesis del simio acuático", la cual expone que en algún momento de la evolución del hombre, los primeros australopitecus vivían en zonas costeras y solían pescar/nadar.

Esta hipótesis se ha quedado ahí, en hipótesis, pues no cuenta de ninguna evidencia arqueológica, solo argumentos.
En el documental se añadía que esta etapa acuática de los antepasados de la humanidad podría haber dado lugar, paralelamente, a una especie de simio totalmente marino, que con el transcurso de la evolución darían lugar a las sirenas modernas.

Solo puedo decir que es improbable que lo anterior se haya dado, no solo por la falta de evidencias, sino porque el pasar de "dos piernas y pies" a "una aleta",
habría costado mucho más tiempo que de "mono erguido algo inteligente" a " mono calvo en cuerpo y muy inteligente".
Por daros un buen ejemplo: 
los antepasados de las morsas tardaron decenas de millones de años en transformarse en las criaturas acuáticas que ahora conocemos,
mientras que los australopitecus (nuestros antepasados) solo tardaron algo más o menos de dos millones de años en volverse gordos, feos, calvos y vagos.


¿Pueden existir? Los profundos.

Los profundos son una de las razas terrestres de seres inteligentes del bestiario del universo de Lovecraft.
Estos seres humanoides, de piel escamosa y aspecto "pezil" pelágico, son descritos en la mitología de Lovecraft como seres inteligentes marinos, muy a menudo con actitudes o intereses que son hostiles hacía la humanidad.
Claramente estos seres no existen en la realidad, pero, ¿podrían los profundos existir o aparecer de forma natural?

Si bien no hay ningún obstáculo genético para que un pez pueda desarrollar patas, es muy difícil que los profundos hubieran aparecido o aparecieren en un futuro por evolución.
El principal problema es que los antepasados de estos deberían ser peces caminantes (capaces de caminar bajo el agua).
Actualmente existen peces que caminan en el fondo marino, sin embargo este diseño solo es viable en peces de pequeño y mediano tamaño (hasta el tamaño de un gato), a mayores tamaños, caminar por el fondo es algo muy desventajoso, ya que un mayor tamaño no sirve para sortear o atravesar los obstáculos del suelo pedregoso que este tipo de animales suelen habitar, además de que el mayor peso del animal, sumado a la resistencia del agua y el poco agarre (la flotabilidad), harían que este se moviera de forma muy torpe.

Este obstáculo se sortearía si los antepasados de los profundos hubieran sido en realidad peces tetrapodos semiacuáticos (como los antepasados de todos los demás vertebrados terrestres), sin embargo los peces tetrapodos semiacuáticos se extinguieron por bastantes razones, siendo sustituidos por los anfibios. Actualmente y en un futuro sucedería lo mismo. 
Ese es el segundo problema: todos los nichos que requerirían ocupar para aparecer, ya están ocupado (o pueden ser mejormente ocupados por otros animales ya existentes o que existieron).

Es muy poco probable que los peces tetrapodos pudieran haber sorteado la extinción y hubieran dado lugar a peces caminantes de un tamaño aun mayor.
Finalmente está el problema de "ponerse erguido" y "desarrollar un cerebro avanzado".
Los antepasados de los profundos deberían haber tenido alguna razón específica por la que ponerse erguidos y caminar a dos patas, cuando esto es mucho menos útil que ir a cuatro patas, tanto en el agua como en tierra.
Aunque claro, no por esto las obras de Lovecraft están mal argumentadas.
De hecho, en sus obras, muchas veces el origen de los profundos es antropogénico (transformaciones lentas de humanos a profundos por ritual y cruce de especies).


¿Pueden existir las sociedades "mente colmena"?

Una de las cosas que más me gustan de la ciencia ficción ambientada en el espacio (y de la astrobiología) es la posible constitución político-económico-ideológico-social de especies extraterrestres ajenas a la humana,
aunque muchas veces esta me decepciona, al menos en el caso de la ciencia ficción.

Muchas veces las obras de ciencia ficción muestran las sociedades extraterrestres de forma muy simplista.
O hostiles, o amistosos, o esclavistas, o imperialistas, o democráticas... pero nada más.
Hay muchas más cosas más allá de la hostilidad y la pobremente representada organización política. ¿Es tal sociedad extraterrestre capitalista, es comunista, es supremacista, es transhumanista, es teocrática?

Lo que aun más me decepciona es que en la mayoría de las obras todas las sociedades, humanas o extraterrestres, son todas laicas, cuando tal cosa es surrealista y utópica.
Sería mucho más realista ver algún que otro estado o facción de extraterrestres ultrarreligioso, pero no monoteístas ni politeístas, como suelen ser los religiosos de la tierra,
sino de religiones aun más exóticas.
Panteísmo, religiones sin dios (ateas), gaiateísmo (naturaleza como la divinidad), etc.

Sin embargo, otras veces, la ciencia ficción innova con conceptos que van más allá de los realizables aquí en la Tierra y en la actualidad.

La gran mente, el todo y el uno, el antiguo único, el dios mundo.
El concepto de mente colmena es simple pero a la vez complicado de explicar.
Básicamente se trata de un tipo de sociedad donde cada ciudadano y cada ser se encuentra en íntima conexión mental o informativa, directa o indirectamente, con una institución, órgano, entidad o ser: la mente colmena.
Y en realidad esta tampoco es una entidad individual, sino que es la entidad formada o alimentada por la mente de cada ciudadano existente.
La mente colmena es uno de todos, y todos son para ese uno. Como en una colonia de insectos, ningún individuo puede existir separada de la colmena, y ninguna colmena puede existir sin individuos.

No existe propiedad alguna en la gran mente colmena y todo está planificado por la gran mente, al igual que en el comunismo, todo es del estado, todo es de la gran mente. Pero tampoco existe intimidad, secretos, privacidad ante la gran mente colmena. Todo lo que tu hagas, recuerdes, sientas, todo lo sabrá, recordará y sentirá la mente colmena.
Seguridad extrema, privacidad nula, propiedad inexistente, cero subversión, cero libertad,
¿esclavitud?, ¿que es eso?,
y la eternidad.

No es imperio, ni democracia, ni dictadura; y al mismo tiempo es incompatible con cualquier ideología política fuera de tal, y con cualquier sistema económico. Es algo diferente e incompatible a todo esto, y único.
Un sistema ideológico, gubernamental, social y económico... todo al mismo tiempo y todo en sí mismo.

Dona tu carne, vende tu alma, y tendrás la eternidad asegurada.
La sociedad mente colmena es posiblemente la idea más "alienígena", utópica o distópica, y/o "transhumanista" que se tenga sobre un posible tipo de sociedad extraterrestre... o una posible opción para la humanidad en un futuro tecnológicamente avanzado.


Actualmente este tipo de sociedades existen, pero solo se dan en los insectos, cuya inteligencia es muy reducido. Por ejemplo, mediante el uso de sustancias químicas, las hormigas pueden formar complejas autopistas de información, una inteligencia más o menos compleja pero virtual.
Solas, las hormigas morirían, ya que no sabrían que hacer ni cómo hacerlo (y muchas veces tampoco podrían).
Eso recuerda a un dicho: la hormiga no puede existir sin la colmena, y la colmena no puede existir sin la hormiga.

Una hormiga sola nunca llegaría al pensamiento de construir un puente, pero en compañía sí, es así como funciona la mente colmena, una inteligencia más compleja formada mediante la unión parcial o total de inteligencias menos complejas, con una conexión directa o indirecta de toda o casi toda la información que tiene cada individuo.



lunes, 17 de abril de 2017

¿Cómo ver el color octarino?

El octarino, ese extraño y ficticio color mencionado en los relatos del universo de Discworld (mundo disco), también nombrado el "octavo color".
Este color, muy relacionado con la magia en tales relatos, es descrito como "una mezcla del verde amarillento y el púrpura" que solo los magos y los gatos pueden ver.

No, no pienses en mezclar colores de acuarela.
Ni marrón, ni gris, ni negro, sino púrpura amarillo-verdoso o verde morado amarillento (como lo prefieras llamar).



Obviamente este color no existe, y nunca serás capaz de verlo, por razones muy obvias (principalmente porque, como ya he dicho no existe) y otras no tan obvias relacionadas con la percepción del color.
Bueno, nunca serás capaz de verlo, a no ser que llegues al final de este artículo.

En cierto modo, el color octarino puede ser observado y experimentado, pero solo bajo condiciones muy específicas (condiciones de laboratorio) o alucinaciones.
¿No sabes a lo que me refiero?, lo explicaré mejor.


Colores imaginarios:

Se sabe que nuestra percepción visual no acapara nuestro rango real de colores imaginables.
Por decirlo mejor, somos capaces de recrear mentalmente colores más allá de los que somos realmente capaces de ver.
Estos colores, denominados colores imaginarios, solo son visibles bajo condiciones de saturación cromática (ver demasiado tiempo un color, hasta que nuestros ojos empiezan a ignorar tal color) o en condiciones de alucinación y ensueño.
Este fenómeno se debe a que, en la visión normal, los conos (las células de nuestros ojos encargadas de percibir el color) se activan levemente cuando reciben el color que no les corresponde.
Cuando ves durante mucho tiempo el mismo color, los conos se saturan, es decir, son apagados o "cegados" parcial y temporalmente, lo que hace que no se activen al recibir otras frecuencias de color diferente. Debido a que estos están apagados parcialmente, no se activan cuando reciben el color que no les corresponde, y por tanto, tal color se ve "más intenso y puro que el propio color real correspondiente".


¿Quieres ver uno de estos colores imaginarios? Perfecto, entonces este experimento sobre la percepción visual del color te encantará.

El experimento es muy sencillo de realizar, simplemente observa el circulo rojo hasta que te aburras, y luego mira hacia el cuadrado cían. 
Te percatarás de que la imagen en tu retina que correspondía al exterior del círculo se ha vuelto más oscura (cosa que no es cierta, tan solo es una ilusión) y que en la parte que correspondía al interior, el cían es mucho más cían de lo que antes era posible.

Este efecto de fatiga cromática, que te hace ver colores mucho más intensos de lo que realmente existen, es utilizado a veces en decoración para resaltar la belleza del paisaje. Por ejemplo en los parques temáticos de Disney, se sobre-expone a los visitantes y turistas al color rosa, para que luego el verde del césped les parezca más verde de lo que realmente es.



Volvamos al tema de los colores imaginarios.

Hay estudios que sugieren que algunas personas podrían ser capaces de soñar (o alucinar) en más de 3 colores primarios, es decir, el rojo, el verde y el azul (y todas sus combinaciones) y un cuarto color primario que somos incapaces de percibir en la realidad.
Este cuarto color primario tendría su base en nuestros ancestros evolutivos.

Los mamíferos descendemos de los terápsidos (reptiles mamiferoides). Estos, como muchos otros reptiles actuales y ya extintos (incluyendo dinosaurios), eran capaces de ver en 4 colores primarios (rojo, verde, azul y el ultravioleta).
Las aves han heredado esta capacidad de ver en 4 colores primarios, incluso hay aves capaces de ver en 5 colores primarios, sin embargo, los mamíferos no hemos tenido esa suerte.

En nuestra evolución solo sobrevivieron los pequeños mamíferos nocturnos capaces de esconderse de los dinosaurios (y más tarde, del invierno nuclear producido por el asteroide que extinguió a tales), debido a ello, nuestros antecesores evolutivos perdieron totalmente la capacidad de ver en color, ya que al vivir en la oscuridad esta capacidad era inútil.
Más tarde, algunas especies surgidas de estos mamíferos obtuvieron la capacidad de ver en al menos dos colores primarios (los cánidos, bovinos, etc).
Solo los primates (y por tanto los humanos) fuimos capaces de recuperar la visión de tres colores primarios, pero, lamentablemente, no del cuarto color primario (ultravioleta).

En resumen, estos estudios exponen que algunas personas podrían conservar el canal visual del color ultravioleta, y se podría acceder a tal en condiciones de alucinación o ensueño, es decir, podríamos ver este cuarto color primario aunque solo fuera en nuestros sueños.




Colores imposibles:

Por el otro lado, también existen los denominados "colores imposibles" de los cuales, el octarino es uno de estos.

Lo explicaré desde el principio:
El color verde y el púrpura son, en ciencias de la percepción visual, colores opuestos, es decir, cuando son mezclados y vemos tales, recibiremos una señal deforme de determinadas frecuencias de luz visible que nuestro cerebro y las células de la retina de nuestros ojos serán incapaces de diferenciar.
Esto se traduce en que la mezcla de verde amarillento y púrpura es percibida como gris o marrón.
Y lo mismo sucede con el verde y el rojo, el amarillo y el azul, y el blanco y el negro.



Por esta razón nunca verás por la calle una cartel de color rojo verdoso, una ventana amarilla azulada o una piedra de color negro blanqueado.
Sin embargo hay una forma de ver estos colores imposibles.

Esta forma de ver tales colores es tan simple como poner en la zona de visión de un ojo un material de color rojo, y en la zona de visión del otro ojo un material de color verde... ¿qué color estás viendo ahora?

Lo anterior se ha llevado a cabo en algunos estudios neurológicos (y también se puede llevar a cabo a nivel casero),
los resultados han sido a veces mediocres (la persona acaba viendo que un color se superpone al otro, es decir, solo ve rojo o solo ve verde)
y otras en otras ocasiones se han observado resultados extraordinarios (hay personas que dicen haber visto realmente nuevos colores que nunca antes habían visto, como rojos verdosos o verdes rojizos).



Dicho esto último, ya es hora de que veas este color quimérico:

El octarino.

El siguiente experimento sobre percepción visual, que se basa en la teoría de los colores imposibles, es muy sencillo de llevar a cabo y te permitirá visualizar más o menos cual es el verdadero aspecto del ficticio color octarino.

¿Listo para ver el color octarino?
Perfecto, lo único que debes hacer es mover ambos ojos hacia tu nariz mirando la anterior imagen, hasta que veas que las dos cruces se sobreponen (haciendo que el cuadrado púrpura coincida con el verde) y enfocando el cuadrado central resultante.
Vamos, que debes ponerte bizco a la vez que miras los dos cuadradritos y enfocas la imagen.

lunes, 10 de abril de 2017

¿Puede existir algo similar al unobtanio de la película "el nucleo"?



El otro día hablé del unobtanio de ávatar, un superconductor a temperatura ambiente, hoy hablaré del unobtanio de "el nucleo".

Veamos las propiedades del material:
El unobtanium es una aleación que convierte el calor en energía eléctrica; virtualmente es indestructuble, ya que se vuelve más resistente cuanto mayor es la presión y la temperatura a la que es sometido.
Otros detalles a añadir es que obviamente puede soportar hasta 6000 centígrados o más, descargas eléctricas inmensas del núcleo, y una diferencia de presión de miles de millones de atmósferas (teniendo en cuenta de que dentro de la nave hay aire o vacío y la tripulación).




Lo primero que quiero decir es que la existencia de un metal así es una paparruchada con menos coherencia con la física que el sonido en el vacío.

Toda la materia (materia normal) que conocemos, existe secundariamente debido al electromagnetismo y depende de tal.
Todos los materiales resistentes son así porque sus enlaces químicos son fuertes, y estos enlaces químicos están basados en el compartimento de electrones.
En el caso de que todo el material estuviera enlazada químicamente (cosa que solo sucede en nanomateriales cómo los nanotubos de carbono) tendría una resistencia considerable, pero aun así ni el límite de resistencia del "material tenaz ideal" (qué es el hipotético material con el máximo nivel de resistencia posible) no es capaz de aguantar temperaturas tan altas y diferencias de presión tan exageradas.
En el caso de una aleación cómo la que estoy analizando es peor aun, pues en las aleaciones muchos de los átomos no están enlazados químicamente, sino intermolecularmente por fuerzas electroestáticas que son muchísimo más débiles.

En resumen, la existencia de un metal tan resistente o incluso indestructible (y esto incluye también la vibranio y al adamantio) como el unobtainio de la película "el nucleo", es una tremenda estupidez.


Claro que sería un material débil, pero a más energía destructiva absorbe, más resistente se vuelve.
En realidad eso no funcionaría así, citación retórica en cursiva, es imposible.

Los materiales normales que conocemos se vuelven más débiles en cuanto más energía deben aguantar.
Esto se debe a que la fuerza electromagnética se debilita a más alejados están las partículas (y estas se alejan cuando sufren tensión o compresión).
Además, los enlaces químicos son destruidos cuando la temperatura aumenta mucho, pues los electrones obtienen tanta "energía" que pierden su afinidad electromagnética y tienden a escapar;
esto es, todos los materiales se transforman en plasma una vez se supera los 5000 o 6000 grados a presión ambiente (y si hay grandes diferencias de presión, cómo en la nave del núcleo en el núcleo, ocurrirá mucho antes).



Entonces, ¿no puede existir nada similar en la vida real?
Epa, que aun no he acabado.

Está claro que la materia NORMAL, cuya resistencia se basa en la fuerza electromagnética, no será capaz de soportar tales condiciones;
sin embargo hay un tipo de materia cuyas fuerzas de atracción son tan increíblemente fuertes que sus partículas son incapaces de existir individualmente por debajo de varios billones de grados,
un tipo de materia cuya fuerza de atracción -resistencia- se incrementa cuando el material se intenta disgregar o absorbe energía (al igual que el unobtanio ese),
un tipo de materia que soporta inimaginables cantidades de energía y no se fractura al absorber demasiada energía, sino que transforma esa energía en materia y se "duplica" a sí misma.

Sí, estoy hablando de los quarks y la "magia" de la fuerza nuclear fuerte.

Ese olorcillo a magia cuántica...

Hay algo que no he mencionado antes, y es que existen 4 fuerzas fundamentales:
la gravedad (fuerza muy débil pero de alcance muy extenso),
el electromagnetismo (fuerza fuerte de alcance moderado, la fuerza de la que dependen los enlaces químicos y los estados de la materia),
la fuerza nuclear débil (de la que se basa la desintegración y fisión nuclear),
y la fuerza nuclear fuerte (extremadamente fuerte pero de alcance limitado a la escala subátomica, la que une a los quarks que forman a los protones y neutrones y, de forma indirecta, mantiene el núcleo atómico unido).

Volviendo al tema, si el material de la nave mostrada en "el nucleo" existiera, esta estaría basada seguramente en la materia de quarks y la fuerza nuclear fuerte.
Sin embargo, lo anterior conlleva incoherencias y problemas:

Lo primero es que la fuerza nuclear fuerte actúa en fuerzas de 3 cambiantes (y no de 2 permamentes, cómo en el electromagnetismo) por tanto es imposible formar, en principio, enlaces estables de quarks y gluones con formas "artificialmente útiles", pues tal conjunto de materia tenderá a colapsar en esferas lo más perfecta posibles cómo protones, neutrones y mesones. En resumen, manipular la fuerza nuclear fuerte es extremadamente difícil por no decir imposible, y con eso de difícil quiero decir imposible para la tecnología actual o de un futuro incluso lejano, eso si llega a ser posible.

Lo segundo es que los  quarks que componen a los protones y neutrones son extremadamente densos.
Si quitáramos todo el vacío y los electrones de la materia normal, y obtuvieramos pura materia de quarks, digamos por ejemplo un metro cúbico, esta materia de quarks pesaría trillones de toneladas.
¿Qué la nave esa del núcleo llevaba un tunelador?, si estuviera hecha de materia de quarks no haría falta, pues su propio peso haría que se hundiera rápidamente hasta el manto o núcleo de la Tierra; y luego, por acción de la aceleración producida, volvería a salir en china.
La fricción sería despreciable frente al peso.

Finalmente, la materia de quarks tendría una resistencia exageradamente grande, nada sería capaz de destruirla excepto la acción de un agujero negro, antimateria o temperaturas surrealisticamente altas.
Si la nave del núcleo estuviera hecha de materia de quarks, sería capaz de atravesar el sol sin ningún rasguño, e incluso sería capaz de atravesar una estrella de neutrones.
La materia de la nave no se rompería, sino que aumentaría de cantidad de quarks, o mejor dicho, de resistencia, tamaño y masa a más esfuerzos destructivos tuviera que soportar.

Chuck Norris aprueba esta entrada.